7 señales de que tu metabolismo se está ralentizando y cómo solucionarlo
El metabolismo es el proceso corporal que convierte los alimentos que consumimos en energía. El metabolismo es además, esencial para múltiples funciones, como la digestión, la respiración, la circulación sanguínea y la regulación de la temperatura.
Sin embargo, en algún momento de la vida el metabolismo puede volverse más lento. Varios factores, como la genética, las condiciones de salud y el estilo de vida, determinan la velocidad de tu metabolismo. Tener un metabolismo lento significa que tu cuerpo no quema tantas calorías, lo que puede provocar síntomas sutiles como antojos de comida, piel seca, fatiga y cambios de humor.
Señales de que tu metabolismo es más lento
Siempre sientes cansancio
Sentirse cansado todo el tiempo sin una explicación clara puede ser una señal de que tienes un metabolismo lento. Cuando tu metabolismo funciona lentamente, el proceso de descomposición de los alimentos en energía también será lento, lo que provocará niveles bajos de energía.
Tu piel está seca
La piel seca o apagada es común en los meses más fríos, pero si lo notas regularmente, esto podría ser un síntoma de tener un metabolismo lento. Las hormonas tiroideas que ayudan a regular la velocidad de tu metabolismo también participan en el mantenimiento de los niveles de hidratación de la piel. Por lo tanto, cuando hay un desequilibrio de la función tiroidea y una desaceleración metabólica, puedes experimentar una piel anormalmente deshidratada.
Estás aumentando de peso
Si estás tratando de perder peso consumiendo una dieta nutritiva y haciendo ejercicio regularmente, pero sigue aumentando de peso, el problema podría ser un metabolismo lento. Cuando tu metabolismo es más lento, el cuerpo no puede convertir los alimentos en energía tan rápidamente, por lo que quema menos calorías. A su vez, más calorías se almacenan en forma de grasa en el cuerpo, lo que dificulta la pérdida de peso.
Sientes frío
Sentir frío, incluso cuando las temperaturas no han bajado, suele ser un síntoma de una disfunción metabólica. El calor corporal se genera a través de procesos metabólicos, y tener una temperatura corporal más fría está relacionado con un metabolismo más lento.
Tienes antojos
Tener antojos de ciertos alimentos, especialmente alimentos con alto contenido de azúcar y grasa, podría deberse a un metabolismo más lento. Algunos estudios han demostrado que los antojos de comida están relacionados con la salud metabólica, en particular las dietas bajas en alimentos nutritivos, los patrones alimentarios nocivos y la composición corporal desequilibrada (como una masa muscular baja y una masa grasa alta).
Estos antojos también pueden ser una señal de que el metabolismo no está convirtiendo con éxito los alimentos en la energía y la nutrición que necesita, lo que impulsa al cuerpo a buscar más energía a través de los alimentos.
Experimentas cambios de humor
Un cambio de humor ocasional no es motivo de preocupación. Sin embargo, las fluctuaciones frecuentes del estado de ánimo pueden ser el resultado de un metabolismo más lento. Los niveles bajos de energía y los desequilibrios hormonales que acompañan a un metabolismo lento pueden contribuir a sentimientos como la irritabilidad y la frustración.
Tienes problemas digestivos
El proceso digestivo y tu tasa metabólica están estrechamente relacionados, ya que la digestión se refiere al proceso de descomposición de los alimentos y el metabolismo se refiere a la conversión de los alimentos en energía. Un cambio en tu metabolismo, como una desaceleración, puede afectar la digestión. Un metabolismo menos activo puede provocar síntomas digestivos inusuales como estreñimiento, hinchazón o diarrea.
Consejos para acelerar tu metabolismo
Si bien no existe una solución rápida para acelerar el metabolismo, existen varias formas respaldadas por investigaciones para aumentar gradualmente tu metabolismo de forma natural. Por ejemplo:
Lleva una dieta nutritiva. Las investigaciones muestran que llevar una dieta rica en alimentos integrales, especialmente alimentos ricos en proteínas, es una forma eficaz de mejorar y mantener tu tasa metabólica. Tu cuerpo necesita más tiempo para descomponer las proteínas, por lo que te ayuda a sentir satisfacción durante más tiempo.
Consume suficientes calorías. Asegúrate de consumir suficientes calorías cada día. Aunque parezca contradictorio, comer muy pocas calorías le indica al cuerpo que se adapte a esa cantidad, lo que puede manifestarse en un metabolismo más lento
Manténte físicamente activo. Con una practica de manera constante, el entrenamiento por intervalos (como el entrenamiento por intervalos de alta intensidad [HIIT]) y el entrenamiento de resistencia son formas de estimular el metabolismo porque fortalecen la masa muscular y mejoran la resistencia.
Prioriza el sueño. Dormir lo suficiente con regularidad ayuda a regular tu metabolismo. Algunas investigaciones muestran que las personas que tienen falta de sueño se sienten menos satisfechas después de comer y metabolizan la grasa de sus alimentos de manera diferente.
Calma el estrés. Tu metabolismo puede estancarse cuando estás bajo estrés. Los expertos teorizan que el estrés crónico interfiere con el proceso del cuerpo de descomponer la grasa. Trata de incorporar técnicas para desestresarte, como leer un libro, tomar un baño o meditar.
Con información de health.com